martes

La misma lluvia


Acá le ha dado por llover a eso de las 6 am. Minutos antes, el viento arrecia y cuando menos se lo espera uno, el cielo se desparrama cual balde en Sábado de Gloria*, la lluvia cae serena pero tupida, consistente. Por la ventana puedo ver como la piel del arrayán cambia de color, sus hojas brillan, recordándome los pasillos de la casa de Jala, y aquella charla:
-Sí mijita, a las plantas hay que platicarles y hablarles por su nombre
-Mira Gertrudis ella es nieta de mi prima, dice que quiere aprender sobre ustedes. Yo le digo que para eso primero hay que quererlas
Sacudiéndola la planta con firmeza
-¿Verdad que así es en todo mi Gertrudis preciosa?
-Echarles su agüita, ganarse su confianza…
Metiendo una varita en la tierra para aflojarla
-Darles su masajito. A las menos ariscas hasta hay que acariciarlas
Saco un cuchillo pequeño y filoso del delantal, partió una naranja y con el juego comenzó a limpiar hoja por hoja.
-Y mira que contentas se ponen cuando uno las pone guapas…

Años después un hombre me dijo que las plantas eran el lenguaje de la madre, su voz. En ese momento entendí que era “eso” que tenía ella, esa nubecita sobre sus ojos al servir la canela con su respectivo chorrito de leche, la luz en su sonrisa al hacer las gorditas de maíz, sus uñas fuertes, y su intuición infalible pa’ curar con sus hierbitas, como solía llamarlas.
-Ándale no seas rejega, tómatelo todo. Las plantitas “saben”

Así es, llueve cada día hasta eso de las 8-8.30, no huele a tierra mojada como en el pueblo. Acá la tierra esta ahogada, y el agua no va a los ríos. Todo mundo usa paraguas y el agua que nos moja camino al trabajo, no es la que cae del cielo sino la que los autos levantan con su prisa, falta de empatía, y como muestra de status.
Acá no hay abuelas que le ofrecen tesitos a una, o que te digan que estas hecha una sopa y te sequen los zapatos en el horno de la estufa. Tampoco pajaretes* (y bendito sea dios). Mucho menos niños jugando en los charcos ó mujeres corriendo para ir a la tienda.
Pero la lluvia es la misma de nuestros abuelos, de nuestros padres, y será la de nuestros hijos. Y seguirá limpiándonos, hablándonos muy a su modo de la vida, de cómo todo se transforma, del sacrificio.
Es tanto lo que damos por obvio, por dado. Quizás un día aprendamos a honrar nuestra sangre y su memoria. La sangre de nuestra tierra, nuestra casa, nuestro viaje.


*en algunos pueblos de México la gente acostumbra mojarse para celebrar el Sábado de Gloria (semana santa). Los niños prácticamente cazan a los olvidadizos con globos y baldes llenos de agua
*bebida acostumbrada en el campo, preparada con leche recién ordeñada, una onza de alcohol y chocolate en polvo

9 comentarios:

  1. envidio tus letras y gozo en mi mente imaginarme cada una de tus palabras..

    dos besos y -ahora- tres tequilas, por la lluvia, claro está.

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  2. Qué lindo cuentas tus historias. Cómo se me antoja ser de nuevo niña y correr feliz bajo la lluvia.

    Gracias por llevarme a los lugares que poco recuerdo.

    Un abrazo

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  3. yo que acá sólo tengo promesas de lluvia disfruto mucho cada vez que usted dice llueve; me cae una gota de su felicidad, de su nostalgia, y me pongo junto a la ventana y la recuerdo, a la lluvia, luego, despuecito a usted...

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  4. Excelente entrada, uno de mis temas favoritos, la lluvia.
    Y digo favoritos porque siempre la lluvia me trae buenos recuerdos.

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  5. No me había percatado de lo diferente que eran los días de lluvia de mi niñez a lo que ahora sucede en esta ciudad, me gustó lo que leí aquí.

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  6. -Lia querida: Esto ya huele a borrachera… ya me dieron ganas de cabañita, chimenea y alcohol ¿gustas?

    -Amara linda: Si no sé porque nos esforzamos tanto en volver una y otra vez a los recuerdos tristes. Tan linda que se ve la Amara sonriente
    Tres abrazos

    -Carlitos: ‘ora sí que yo no entiendo muy bien eso de las promesas de lluvia, ¿con la visita de Jimena y todo? ó ¿de plano el señor Tlaloc se saltó su casa…?
    Besos azucarados

    -Pablo: Qué gusto que la lluvia no sólo traiga nostalgias.
    Un abrazo

    -NTQVCA: Es increíble lo rápido que cambian las cosas y lo fácil que olvidamos.

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  7. Me ha encantado tu escribir vendré por mas letras

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  8. Dónde andas mujer?
    Ya vuelve con tus historias.

    Bien recibidos tus abrazos. Van tres para tí también.

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  9. tenía un montón de tiempo sin pasar por aquí y veo que aún no hay letras nuevas... ya te extraño.

    dos besos de mis labios rojos para tí.

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