
Me abrazo a la taza de café. Sorbo despacio y el vapor se eleva por mi rostro. ¿Qué mezcla alquímica hay entre éste aroma y el placer de mi lengua? ¿Qué espíritu canta en mi sangre? ¿Qué clase de dios-demonio me cabalga desde dentro? ¿Cómo puedo estar tan segura de beberme la noche, si mis manos tejen los cabellos del sol?
¿Quién soy yo en esta taza?