martes

Lugares

Y entonces, aquel hombre gigantesco al que llamaban el tirano, se abrazó a mi cintura y recargo su cabeza sobre mi pecho.

-Estoy tan cansado
¿Puedo quedarme a vivir aquí?

-El tiempo que quieras.

-Para siempre.

Lo envolví con mis piernas y acomode su cabeza para que sintiera mi pulso.

-No creo que vivamos tanto.

Un calor intenso emano de mi centro, me sentí su madre y su amante, su hermana y su abuela, su esposa y su hija.
Acaricie su frente hasta que se quedo dormido.

Al final hay sitios, en los que todos los hombres, somos iguales.

5 comentarios:

  1. el caso es encontrar ese sitio... un bello momento...

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  2. He tenido suerte, al llegar tu, vine yo.

    Besos! y me quedo!

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  3. tnf25: Somos exploradores :)

    Ahriel: Gracias por la invitación, ya vi las bases y son para España, yo vivo acá en México. Besos.

    Penélope: ¡Qué bonita casa!

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  4. Al final hay sitios, en los todos los hombres, somos iguales. creo que antes de "todos" debería ir un "que". Está demasiado Chévere el cuento

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  5. Tienes toda la razón, ahora lo cambio.
    Gracias.

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